Este tipo de padecimientos suelen aparecer en torno a la edad de treinta años. Se produce un alargamiento rápido de la musculatura del esófago con los siguientes síntomas añadidos:

- Existe dificultad para alimentarse o para beber líquidos.
- Toda la zona del esófago aparece dolorida.
- Es muy frecuente que el enfermo pierda peso.
- Se puede producir vómito de los alimentos ingeridos.

Por lo general para la curación de los cardioespamos se recurre a la cirugía. Se corta un trozo de esófago ya que se ha producido su alargamiento y la recuperación en las siguientes semanas eliminar toda la sintomatología.

Aunque en principio los cardioespamos no tienen que ser motivo de preocupación si que pueden derivar en una serie de complicaciones que es aconsejable evitar, por esto mismo es necesario ponerse en manos del médico que nos trate para que determine qué tratamiento seguir y si es necesario recurrir a la cirugía.