Las hernias de esófago por lo general son descubiertas en una exploración médica pero sin que el paciente consulte por una dolencia relacionada con esta enfermedad.
Aunque existen muchas formas de hernias de esófago la más común es la que se produce al empujar una parte del saco estomacal hacia arriba, es decir a hacia la abertura donde el esófago se comunica con el estómago.
Los motivos de esta presión sobre el diafragma pueden ser varios: obesidad, embarazo, bronquitis.
Los síntomas que pueden asociarse a la hernia de esófago pueden presentarse con mayor o menor intensidad y suelen ser:
- Falta de aliento.
- Dificultades para ingerir alimentos.
- Dolores en la zona central del pecho.
El tratamiento de las hernias de esófago es mediante la utilización de medicamentos que neutralizan los ácidos del estómago y también mediante el cambio de hábitos de alimentación recomendándose que se coma con más frecuencia pero en menor cantidad.
El reposo mientras se mantiene la cabeza en posición elevada también son aconsejables.
En última instancia se puede recurrir a la cirugía.