Con este nombre se conoce la vellosidad en una cantidad anormal especialmente en las mujeres. En el caso de los hombres esa vellosidad, salvo que se encuentre en zonas muy poco frecuentes, no pasará a ser un problema.
En algunos casos las mujeres que padecen hirsutismo tienen algún tipo de desarreglo hormonal, sin embargo la aparición de vello por ejemplo en los brazos y las piernas no suele estar relacionado con las hormonas.
Si se quiere eliminar este vello hay que recurrir a métodos que en algunos casos no son definitivos y en otros tal vez no dan el resultado apetecido, de todas maneras siempre se puede lograr una reducción de la cantidad de vello.
Si el problema es sólo ligero se puede recurrir a las depilaciones con cera y a la utilización de cremas de peróxido de hidrógeno o agua oxigenada como la popular “andina”. Con este compuesto lo que se consigue es que el vello tome una coloración rubia y sea menos apreciable.
Si el problema es más grave y la depilación con cera no es suficiente o resulta muy molesta entonces se puede recurrir a la depilación láser. Lo que se pretende es destruir cada raíz del pelo para que éste no vuelva a crecer. Si decide utilizar el sistema de depilación láser o cualquier otro ofrecido por clínicas de cirugía estética sería aconsejable que dicha clínica se comprometiese bajo contrato a la eficacia de sus tratamientos.