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El
tétanos es una enfermedad muy grave que puede ocasionar la muerte.
Sin embargo, por fortuna, no es una enfermedad muy común.
Esta enfermedad tiene su mayor complicación en una neurotoxina que
es producida por la bacteria Clostridium tetani. El origen de su gravedad
se debe a que esa neurotoxina penetra en el sistema nervioso y puede llegar
a  producir
la paralización de funciones indispensable para la vida.
La bacteria se puede encontrar en las heces de los caballos y animales de
granjas o en tierras de cultivo.
Para verse afectado por el tétanos es necesario que la bacteria entre
en la sangre pero alejada del oxígeno que la eliminaría, por
esto mismo los cortes profundos donde llega incluso a verse afectada la
zona muscular son los realmente peligrosos, sobre todo si se han producido
con herramientas contaminadas por heces o tierra de cultivo donde se ha
abonado con estiércol. En estos casos lo más recomendable
es limpiar cuidadosamente la herida y procurar que toda la zona del corte
esté al completo en contacto con el aire, sin que queden zonas muertas.
Es justamente en esas zonas de tejido muerto donde mejor proliferan las
bacterias del tétanos sobre todo si la herida queda cubierta con
vendas y resulta imposible que circule el aire llevando el oxígeno
a todas sus partes.
Los síntomas del tétanos pueden aparecer a los pocos días
o al cabo de dos o tres semanas y se caracterizan por rigidez de la mandíbula
y de otros músculos del cuerpo que puede conducir a la dificultad
para respirar y a espasmos.
Si la enfermedad ha llegado a evolucionar durante varios días y los
efectos de la misma son notables su curación es más complicada
y la misma puede precisar de varios meses ya que a pesar de eliminar la
bacteria causante del tétanos la neurotoxina y sus efectos no son
de tan fácil eliminación.
El tétanos también se puede prevenir mediante la vacunación. |
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