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Huevo

25 August, 2009

El huevo contiene ocho aminoácidos esenciales para nuestra salud, y está considerado como el modelo proteico ideal, por su contenido, calidad y digestibilidad. El principal constituyente de la clara es la proteína; la yema aporta, además de las proteínas, grasas saturadas, específicamente triglicéridos y colesterol. Contiene también lecitina, que vehiculiza el colesterol y protege al organismo de los efectos dañinos del colesterol excesivo. La lecitina, como vimos en el apartado de “complementos nutricionales”, es una grasa combinada con fósforo, que emulsiona las grasas, o sea, las divide en partículas muy pequeñas y las hace más digeribles.

El huevo aporta en su yema hierro, que, si se sobrecocina, pierde su actividad. Es rico en triptofano, aminoácido esencial, y en vitamina A y D.
En una dieta vegetariana, el huevo es una excelente opción al asegurar el aporte de proteínas de alta calidad. Si también se consumen carnes, deberá disminuirse su consumo debido a las grasas saturadas y el colesterol que ambos elementos poseen. Por su contenido en grasas, la yema del huevo es bien tolerada por personas con problemas hepáticos.
En las dietas hepatoprotectoras o bajas en grasas, se limita la ingesta del huevo o se indica el consumo sólo de claras. La clara no contiene grasas.
El huevo crudo no debe consumirse en forma habitual. Es de difícil digestión por su contenido de avidita que inhibe una enzima pancreática, la tripsina. La avidita, además, impide la absorción de la vitamina B3 o niacina. Con el calor de la cocción la avidita se inactiva y así se facilita su digestión. Es importante cocinar bien la clara para evitar la posible contaminación con algunas bacterias.
La cáscara del huevo esta formada por carbonatos de calcio y magnesio y sales de fosfato. Al hervirla con sal y vinagre, se solubilizan y se facilita su absorción. Moliéndola en un molinillo de café se obtiene un polvillo blanco que es una excelente fuente de calcio y sílice, por lo cual resulta conveniente incluirlo en la dieta. El sílice se encuentra en la delgada tela que cubre por dentro la cáscara.

Muchas formas de preparlo en distientos platos o postres, no importa cómo, sino recordar sus beneficios e incluirlo siempre para obtener una vida más saludable.

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