Sintomas y remedios

Un auténtico problema para las relaciones sociales puede ser la halitosis o mal aliento. Una afección cuyo origen puede estar en diversos hechos como una mala higiene bucal, enfermedades, consumo excesivo de alimentos con ajo o cebolla, o alguna infección.

Para evitarla, siempre que sus causas no residan en un problema de salud, es conveniente realizar diariamente un buen cuidado de la boca. No obstante, también existe una serie de remedios caseros para acabar con ese mal aliento.

Halitosis

Uno de los trucos más frecuentes es realizar una mezcla de agua, media cucharada de sal y otra media de bicarbonato. La combinación servirá para enjuagarnos muy bien la boca con ella durante unos minutos.

Otra opción es elaborar una infusión de hierbabuena, perejil e hinojo. Dicha bebida deberemos ingerirla a diario, una vez por la mañana y otra por la noche.

Si hemos tomado una comida donde el ajo o la cebolla estaban muy presentes, lo recomendable para evitar esa halitosis es hacer gárgaras con una mezcla de agua y sal.

Algo muy natural y a la vez muy saludable es comer a diario una manzana pues está considerada como un instrumento de lucha contra la halitosis. Y eso sin olvidar que además ejercerá como dentífrico.

Manzana, fruta saludable contra el mal aliento

Masticar hojas de menta es uno de los remedios caseros más usados ya que se consigue una efectividad muy elevada.