Sintomas y remedios

Cada vez más, el uso de las plantas en el ámbito de la salud está ocupando un papel más relevante. Y es que existe un amplio número de ellas que pueden ser utilizadas para prevenir o curar algunas afecciones o enfermedades concretas.

En este caso, es necesario hacer mención al harpagofito, que tiene su origen en el continente africano y que puede utilizarse para curar ciertos males. Por ejemplo, es usado para prevenir los dolores de gota pues contribuye a eliminar el exceso de ácido úrico.

De la misma manera, dicha planta también nos ayuda a ponerle freno a la osteoporosis y lo mismo ocurre con la artritis y la artrosis. En concreto, en este caso lo que hace es actuar como antiinflamatorio de las articulaciones y así se consigue que la persona afectada sufra muchos menos dolores.

En este último aspecto que nos ocupa lo recomendable es llevar a cabo este tratamiento durante dos o tres meses para poder ver resultados efectivos.

Para no tener digestiones difíciles y para combatir los edemas también es utilizado el harpagofito, que no debe utilizarse por embarazadas o por gente que tenga enfermedades estomacales.

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