La caries es una enfermedad causada por la placa bacteriana y en concreto se materializa en la destrucción de los tejidos duros a consecuencia de los ácidos producidos por estas bacterias en la descomposición de los restos de alimentos que quedan en la boca.
Las caries se ve favorecida por varias causas entre ellas hay que tener en cuenta que por lo general los dientes posteriores o los molares y premolares se suelen ver más afectados debido a que su limpieza es más complicada y a que la lengua en su movimiento natural no realiza tampoco labores de limpieza con la misma intensidad y facilidad que en los dientes anteriores, la mala higiene bucal también contribuye a la aparición y empeoramiento de la caries, una alimentación rica en carbohidratos pueden favorecer también la aparición de la caries.
Según su estado la caries se puede clasificar en caries activa que tiene una coloración blanca, la caries detenida que tiene una coloración más oscura y la caries precoz que afecta a niños menores de dos años.
La caries no sólo es un problema estético ya que condiciona negativamente la calidad de vida de la persona que la padece y además se ve obligada a recurrir a prótesis que le permitan mantener una dentadura suficiente para la correcta masticación.
Es recomendable para evitar la caries reducir el consumo de dulces y azúcares que son muy perjudiciales no sólo para nuestra dentadura y además realizar una limpieza de los dientes detrás de cada comida.
Es importante que los dientes se laven inmediatamente después de terminar de comer ya que de esta manera se impide la actuación de las bacterias que causan los daños en los dientes. Los enjuages bucales también pueden ser eficaces en este sentido y el uso de la seda dental es muy recomendable para una correcta limpieza a fondo. Por lo menos una vez al año se debería de visitar al odontólogo.