Sintomas y remedios

El estrés, padecer de anemia, una mala alimentación o un embarazo son algunas de las causas que pueden provocarnos   la caída del cabello. Una problemática a la que tanto mujeres como hombres prestan atención ya que la calvicie no está considerada como algo bello desde el punto de vista estético.

Para detenerla o frenarla existen diversos remedios caseros, usados de generación en generación, que a continuación le detallamos:

Mezclar, a partes iguales, el zumo de un limón y el jugo de una cebolla. El producto resultante de esta unión lo utilizaremos para masajear nuestro cuero cabelludo.

Cortar un ajo en dos trozos y estos los vamos frotando por todo nuestro citado cuero cabelludo. A ello añadiremos unas gotas de aceite de oliva y masajearemos la cabeza para acto seguido taparla con un gorro de plástico. De esta manera, pasaremos la noche y al día siguiente deberemos lavar nuestro cabello con un champú que sea aromático para así contrarrestar el fuerte aroma de los productos naturales utilizados.

Masajear nuestra cabeza, y en concreto las raíces del pelo, con leche de coco pues esta promueve el crecimiento de aquel.

Realizar una loción con agua y hojas de ortiga. Esta mezcla se hierve y se deja reposar durante toda una noche para luego, al día siguiente, aplicarla en nuestro cuero cabelludo.

Frotar la cabeza con la pulpa del aloe vera y dejar que esta se seque en nuestro pelo para seguidamente lavarlo con agua.

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