Sintomas y remedios

Los espacios abiertos y las calles concurridas son dos de los elementos que provocan ataques de pánico en las personas que sufren agorafobia, un trastorno de ansiedad que se origina por el hecho de sentir incapacidad para hacer frente a situaciones que son embarazosas o que no se pueden evitar.

Un 5% de la población española parece ser que, en algún momento de sus vidas, ha sufrido un ataque de este tipo de miedo, que ahora está de máxima actualidad debido al estreno de la película “Todos están muertos”.

Para poder conocer más a fondo en qué consiste aquel, queremos darte estos cinco datos de gran interés:

1. Lo habitual es que se sufra a partir de los 25 años y es más frecuente en mujeres que en hombres.
2. Miedo a tener una crisis de angustia, cuando ya se ha sufrido una, o situaciones de fuerte carga emocional en el pasado son algunas de las habituales causas que pueden llevar a que alguien padezca agorafobia.
3. Muchos son los síntomas que identifican un cuadro de este tipo: asfixia, escalofríos, miedo a morir, sudoración, temblores, palpitaciones, mareos, náuseas…
4. Lo habitual es que las personas que tienen este trastorno posean pensamientos tales como tener miedo a estar solas o a encontrarse en un espacio abarrotado de gente donde sea imposible salir en caso de urgencia. No obstante, también sienten pavor por separarse de los demás.
5. Antidepresivos y terapias de tipo conductual son algunos de los pilares de los tratamientos que habitualmente son establecidos para las personas con agorafobia.

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