Sintomas y remedios

La rabia es una enfermedad infectocontagiosa proveniente del virus  rabdovirus que ataca al sistema nervioso.
El principal agente propagador es la saliva de un animal infectado con rabia.
Una vez en nuestro organismo, se distribuye por los nervios alcanzando el sistema nervioso central donde se multiplica ampliando la capacidad de contagio y afecta al hígado, pulmones y demás órganos.
Primero el paciente padece la etapa de incubación que dura hasta tres meses donde el paciente puede o no tener síntomas luego de ello comienza a manifestar fiebre, cefalea, náuseas, vómitos, dificultad para respirar… etcétera.
A esta fase le sigue un periodo de excitación, donde el paciente presente alucinaciones, agitación, respiración irregular y convulsiones.
La fase final termina con la vida del paciente que fallece por paro cardiaco o en algunos casos se presenta una parálisis de las extremidades
Una vez iniciada la enfermedad la mortalidad es casi del 100 por cien.
Lo importante es la prevención, para ello existe la vacunación antirrábica para animales y la gammaglobulina para los humanos.
Ante la mordedura de un animal desconocido es de suma importancia ir a un centro asistencial higienizar la herida y los especialistas le aplicaran la vacunación correspondiente, a fin de evitar que la enfermedad avance.